SANTA LUCIA DE TIRAJANA - LA FORTALEZA - SANTA LUCIA DE TIRAJANA
Enlace para visualizar las fotografías.
https://www.dropbox.com/sh/ail2oqgp6mz2nqc/AACgk5pVVzSM5oqcz-W4FbL4a?dl=0
Circular Santa
Lucia - Fortaleza de Ansite
La distancia original de la ruta propuesta es de unos 13 KM
y una duración aproximada de 4 horas. Lógicamente dependiendo del ritmo y el
tiempo que se pare para comer algo y coger fuerzas. Vamos a intentar recortar
la distancia un poco para que no sea demasiado larga para los que no estén
acostumbrados a caminar mucho tiempo.
El punto de reunión será el aparcamiento de IKEA a las 08,30
horas. Deberíamos ser puntuales con la intención de no empezar a caminar
demasiado tarde sobre todo si sale un día caluroso.
Se recomienda llevar agua suficiente, aproximadamente 1
litro. Algo energético para picar en la mitad del camino, para reponer fuerzas.
Crema protectora y gorra o sombrero para
protegernos del sol. Calzado y ropa adecuada para la práctica del
senderismo.
Al finalizar la ruta como siempre, cada uno decide que
hacer, donde comer etc., pero Maria de los Ángeles ha propuesto un lugar en la
zona de Santa Lucia denominado DONKEY SAFARI, que es una granja escuela de
recuperación del burro donde al parecer se come bien por aproximadamente 10 €.
Se ruega confirmación de quien esté interesado porque hay que solicitar
RESERVA.
http://www.burrosafari.com/.
CRONICA DE LA RUTA
RUTA
FORTALEZA DE ANSITE (SANTA LUCIA DE TIRAJANA)
El domingo día 15
de marzo, nos reunimos en el punto de encuentro habitual (mesón de la
base) a 0800h, para recoger al personal que no dispone de vehículo, para
posteriormente dirigirnos al aparcamiento de IKEA en parque comercial La
Estrella donde quedamos a 0830h con el resto de la gente.
Desde este punto completando los coches para no subir todos
y encontrarnos con problemas de aparcamiento nos dirigimos hacia Santa Lucia de
Trajana, lugar de comienzo y final de la ruta al ser esta circular.
Para este senderismo tenemos nuevos inquilinos que se
unen al grupo, juntándonos esta vez 14 personas (tendríamos que idear algo tipo
“bautismo” o “paso del ecuador” con la visita del rey de las montañas para
recibir a los nuevos, incluida la nueva mascota).
El guía Diego hizo la ruta el día anterior en bicicleta y
ya nos está metiendo el miedo en el cuerpo.
Se prevé un día bastante caluroso después de un invierno
poco usual en las islas.
Sobre las 1000 h, y después de la parada de rigor para
desayunar y de la típica foto de grupo para el recuerdo, comienza la ruta.
Empezamos con una buena bajada hasta llegar a La Fortaleza,
los senderos son bastante estrechos y nos pone a todos en fila india.
Caminamos durante una hora y llegamos a la explanada de La
Fortaleza, paradita técnica para recuperar, beber y comer algo y a seguir.
Subimos a la cueva, las vistas son impresionantes y como
siempre para no perder la costumbre, Miguel que regresa al grupo de visita
desde Cádiz después de pasar “a mejor
vida”, se pone a hacer el indio saltando
de piedra en piedra.
Desde La Fortaleza seguimos bajando por una pista
asfaltada, hasta llegar a un grupo de casas con aficionados “merengues” donde
hacemos un reagrupado para no ir desperdigados.
A partir de aquí, llega lo duro, empieza la subida y el
calor ya está haciendo mella en algún integrante del grupo.
Claramente el grupo se rompe y se empiezan a ver los
síntomas de cansancio. Las piernas empiezan a doler y el camino no lo pone nada
fácil. Los que mejor están físicamente van un poco más rápido pero sin
olvidarse de que hay compañeros que les cuesta un poquito más.
Llegamos al punto de partida sobre la 1420h, los que no
se protegieron debidamente (incluido el menda), un poco escaldados por el sol y
deseando tomarse una cervecita bien fresquita (el poco agua que quedaba ya
parecía un caldito caliente).
A la 1545h, teníamos reservada las mesas para comer en el
“Burro Safari”, estaba petado de gente y un grupo amenizaba con música
pachanguera la sobremesa.
Después de recuperar fuerzas con un menú bastante
asequible y aceptable empezó el bailoteo donde se demostró que hace más el que
quiere que el que puede y a unos cuantos se le pasaron los dolores de la marcha
de golpe.
Después de unos bailoteos, nos despedimos y fuimos
bajando con independencia esperando ya a la próxima quedada después de una
semanita de descanso para recuperar.